O
¡Desead montañas no ser yo!
¿son mi sudor?...
Y el tiempo se autoexcluye empañado.
¡Brotad!...
Rosas sin amos.
¡verdor!
En barbecho los campos.
¡huid!...
La añoranza es nitrato.
¡La fuente!
Muerta está en aquel patio.
Y despacio los cuerpos
Van buscando ¡ prohibidos!,
El placer del verano.
De la Ermita su pozo,
El brocal bien cerrado,
una verja de olvidos,
¡ pecado!...
En los “huertos Crispín”,
Las mujeres lavando,
El molino moliendo…
Las viudas llorando.
Se canta por Piquer
¡ay ,como se la lleva el río!...
Es un tempo de ayer,
Ellos fueron presente.
¡Herida!...
Hoy la niña que ama
Ya mañana es pasado.
Paco José González