Acallando la pesada noche, y con brillo estival acomete en paz el solitario rey;
cuyo culto se ha desestimado y perdido, pero por suerte se cumple una ley
que dentro del territorio de la nación aún tenemos fiel nuestro Arte de Blasón
refleja en su soberano estandarte, una excelsa figura plasmada en sublimes
paños que por más que haya tenido que manar de entrañas perpetradas
por el acero, sangre derramada, angustias posteriores y hastíos previos,
luce espléndida sin congoja mi bandera, revive de fiebre ferviente patriótica
en este día tan especial, se puede olfatear el aroma divino de la Libertad;
más allá de derrotas y perdidas, trovada estaba la trayectoria, catapultada a
la victoria contando con la aclamada insignia de mi Patria que cada día
remonta vuelo y refleja suavidad gloriosa del cielo mismo donde reposa,
como real virtud, el astro bondadoso dibujado sobrio y solemne, pero
vivo, alegre, sumamente brilloso...
Se cumplen 205 años, hoy se revivieron las brasas para brindar al suelo Argentino,
calor a las masas y a su pueblo salud! Más que nunca orgulloso del heraldo
que nos fue legado, del sacrificio de héroes, mentores de nuestro país y su laúd;
agradecido por su dedicación con tanta osadía, aventura y virtud ; yo ruego por que
sepan perdonar a quienes ignoraron su valentía; en esta fecha les rendiré
homenaje y procuraré hacia generaciones venideras demostrar que no hay
nada más sagrado que llevar celeste y blanco de tatuaje!