Mis besos son para ti miel pura,
aquéllos el azúcar de esa miel;
los míos no implican riesgo y los de él,
tienen sabor a aventura.
Un beso mío comenzó una historia
que aún hoy no conoce final,
los de él, la entrega total,
haciendo estragos en tu memoria.
Mis besos significaron la vida
de un amor intenso y verdadero.
Los de él un susurrante "te quiero"
y mil "te quieros" a escondidas.
En mis labios hay un amor ciego,
lleno de dulzura, lleno de perdón;
en los de él, el fuego de una pasión
o una pasión llena de fuego.
Mis besos seguidos constantes,
siempre a pedir de boca,
en cada uno de tus instantes,
haciendo que te sientas mía;
pero los de él ¡qué ironía!
son los que te vuelven loca.