Se me escapa de las manos,
y no tengo memorias de ello.
¿Puedo vivirlo yo también?
Porque siento que se aleja cada vez más.
Dicen que se puede vivir la vida de muchas maneras.
Sólo conozco una.
Siento que solo puedo respirar y que me he llevado una vida en un solo suspiro.
Quiero correr hacia aquello que me dará mi libertad.
Pero mis pies están atados y parece que al intentar liberarme, estoy atando a alguien más.
Se me está escapando.
Y aún no tengo ningún recuerdo de ello.
¿Liberarme sigue siendo una opción?
Porque si ya se alejó lo suficiente, ya no quiero seguir intentando.
No quiero levantar mi vista y ver lo que he perdido.
Intento ser libre, pero mis manos siguen lastimandose al tratar de liberarme y el miedo no es mi mejor herramienta.
Se veía tan fácil poder avanzar.
Tengo que correr.
¡Corre!
¡No mires hacia atrás!
No tienes porqué quedarte siempre atada.
Se te escapa la oportunidad de ser joven y libre.
¡Corre!