Este pesar que llevo, y llevaré
por siempre...por tu ida hijo mío,
después de mi partida se me
pasará, porque perderte, es tan
grande mi dolor en mi alma,
que nadie me la quitará, porque
perderte es como arrancarme
una parte de mi ser.
Dios si fue tú desicion, lo acepto, porque tú me lo diste; hoy te lo llevaste y me
causaste esa pena, pero sé que
contigo estará bien, y recibiré su
bendicione día a día, y hasta le
rezaré para que me quite este
martirio por tú ausencia, porque
sé que ya no llegarás más a casa
hijo mío de mi corazón.