Lourdes Aguilar

SE BUSCA

Amanecí confusa, ahíta

mirando una y otra vez mis dedos

palpando mi cabeza en busca

de un hueco, una grieta o fisura

mi piel parecíame un viejo costal

tampoco era mío el rostro azorado

que devolvía indiferente el espejo del cuarto

era igual sin embargo no era la misma

en el interior mío nada quedaba

eran extremidades moviéndose solo

un gran vacío me ocupaba toda

 

¿Han visto mi alma?

¿Alguno la ha visto deambular por ahí?

Es pequeña, brillante, ligera

cual luciérnaga que vaga de noche

adora la música, las flores, el musgo

cual cocuyo que arrulla en el bosque

 

Es curiosa, alegre, coqueta

una guirnalda corona su frente

en libros abiertos suele rondar

deja a su paso estelas de azahar

¿La habrán visto quizás en el parque

en un teatro o en la gran catedral?

¿Podrá darme razón de ella algún pescador

si acaso un destello más intenso halló en el mar?

 

La busco por tierra y por aire

pregunto en mercados y calles

recorro cementerios y bares

no sea la haya atrapado un tunante

 

No recuerdo si fue de mañana o de tarde

o en noche cerrada que de alguna pesadilla escapó

¿Quedó tal vez enredada en una de tantas?

¿En la hoja de una revista que mi madre quemó?

¿En el circo, en la chistera que el mago usó

o emparedada en la casa que triste dejé?

¿Podría ser en la escuela, en el salón o el patio

donde algún pillo sin compasión la agredió?

 

Vuelve, vuelve rayo de luna

vuelve a tu nicho e ilumina mi vida

musa de alas sedosas y cristal corazón

con tus manos protege

la flama diminuta de mi pobre oración

Mi alma, mi fantasía ¿alguien la vio?