No encierres la nieve
tras rejas de plata
y siente su canto,
su hechizo y su magia;
la nieve, en el suelo,
moldea palabras,
figuras y sombras
que ocultan pisadas;
hay huellas perennes,
recuerdos que pasan
y brisas marchitas
con aires de infancia;
un árbol saluda
con nieve en sus ramas,
susurra: \"María...
te ofrezco mi alma...\"
Rafael Sánchez Ortega ©
16/01/21