Cora_poe

Barranco poético

Mirar el barranco y su elegancia
observando todos sus componentes
y saber que no hay en él, muerte,
nos delata en el rostro, gran calma.

Sentir durante el día el frío aire,
que vive muriendo como un gran sueño
y teme ser marioneta sin dueño,
a verle viene cada noche el buitre.

Ver en ese instante magníficas alas
planeando el cielo como símbolo
convirtiendo viejos años cenizos
en representaciones mendigadas,

ver en cada sueño la decadencia,
el desperdicio del oculto mensaje
ver en su habilidad el alcance,
es síntoma de positividad.

A veces sentir renovación,
es sentir la abundancia de la vida,
el arte de bailar con la memoria
revelándose nuestra pasión.

Cuentan que Safo, de naturaleza
amarga, aunque valiente en el amor
harta de bellos prodigios
vistió el áureo carro de Afrodita,

como la elegancia de aquel barranco,
que pasó de la fría muerte al sueño,
del símbolo a la renovación,
y así, dio origen, a lo poético.

Galilea R