Amalia Lateano

Nono Rafael

 

Eras muy pequeñito y embarcaste
con pinceles celestes de tu tierra 
para aventar fantasmas de la guerra
la pureza en los ojos te quedaste.

Oh! Génova lejana ! Recordaste 
 al golpear el yunque entre la yerra.
Azul era aquel mar que nos entierra!
Nunca volviste. Sé que lo pensaste...

Cuando pisé tu Patria la hice mía.
Cuando vi los albatros en la bruma
 que volando tan ciegos rebatían

en las persianas, supe lo que unía
el sabor de tu mar que lo perfuma.
¡Mi infancia fue feliz, les contaría!

 Amalia Lateano