Angela.Beatriz

Dualidad

El abandono frustrante,

las sonrisas constantes.

 

La indiferencia a mi propio dolor,

aquella que tiñe mis ojos de diferente color.

 

No existen más encubridores;

Solo están las alucinaciones.

 

Al fin y al cabo,

aun en mí queda algo de esa niña silenciosa,

disgustada de las sonoras risas

y aburrida de las palabras precarias.

 

A pesar de todo sigo siendo la misma:

Una simple pequeña de miradas agrias.