Jose Honorio Martínez Ochoa

EL SILENCIO

El silencio visual divisa el oleaje y lo celebra,

mi voz como una profecía en el verano;

la convierte en energía y abre el lento vértice del río,

la luz y la luna desplegada lo recuerda.

El escrito nos recrea el verdecido universo y nos despierta.

El relámpago amarillo en nuestras noches

se verte en su revuelo como la flor entre las manos.