amaroz

LA LLUVIA

cada paso se pierde

como cada mirada indiscreta

las manos se juntan

como apurada somnolencia

la lluvia arrecia

los cuerpos se abren

como sombrillas boquiabiertas

la calle reflejaba como espejo

parejas en el cemento

solitarias en sus adentros

las gotas se confundían

a pesar de ser desconocidas

unas eran dulces

por ser de cielo

otras eran amargas

por ser del corazón

la lluvia me cae

y el viento me golpea

gemelas

en una sinfonía

que me aman

y me mueren

tormentas

divergentes

son las niñas del cielo

azul... es

la que guiña

negra... es

la que miente

dices que eres mía

como lluvia que bebía

dijiste que eras mía

cuando eras solo lluvia que corría