Pueblo de calles blancas,
de jardines verdes,
pueblo pequeño de mi tierra
lejos de ti te evoco.
Calles estrecha
que un día marcaron
de mi vida el camino,
En ti comencé a andar,
tu me enseñaste a amar,
por tus calles vagué,
por tus campos caminé.
Fui niño en ti
hombre, me enseñaste a ser.
En ti, ame la naturaleza,
comprendí la libertad,
contemple la belleza,
evoque la paz.
Me diste cuanto soy,
me enseñaste cuanto sé,
añoro, tu serenidad
tu paz, tu sencillez.
¡Cuántas mañanas! en tus montañas soñé,
¡cuántas tardes! por tus calles amé.
Hoy Pueblo mío,
que lejos estas,
ya, casi, ni te veo,
y cuando a ti vuelvo
forastero me considero,
ya vez,
yo, que olvidarte no puedo,
yo, que soy parte de ti,
en ti, no se vivir.
¿Cómo pudiste dejarme partir?
tan lejos de tus gentes,
¿es que no supe amarte lo suficiente?
Dura es la lección de aprender
pero si un día puedo volver,
¡Oh! Pueblo mío
nunca mas me alejaré.