Mi alma se reserva para tantos
que no hay ninguno ya además
a quien contárselo en mi jaula:
libertad de hacer lo que me dé la gana
entonces sea lo principal
así disfrute a ver qué tal
me sienta la soledad, que tú me dejas
a mí de lado todos los días
y no es normal eso
en ti menos que en cualquiera
que por ahí pase; ¿y avanzais...?
Soy el ángel de la paz que te vigila,
yo además. Soy el guía
que nunca os llevará no hacia atrás.
Soy vibrante porque hablo este lenguaje
elemental... Estoy sin agua
pero bebo de las fuentes que me traen.
Sabe amargo el errante divagar:
esto no es tal. La verdad
está prohibido lo que más;
acaso importa? No qué va...
Ya soy otro de todas formas
(uno más) aquí en la cuerda floja
intentándolo, equilibrio no me falta:
ya me caigo a donde estaba
más arriba: naufragar que las nubes todo me dan.