Yo contemplé
la tarde
que acarició
tu rostro, extasiada.
Y te recorrí a cada instante sublime
Por que vengo de dónde se abrazan
los vientos y se besan los mares profundos.
Nada más sofocante
que la mirada ardiente
de un contrincante lejano.
Reconozco que el mar conspira
en la tormenta.
Yo no peleo distancias
pero se me antoja darle forma a la roca que sostiene
su oleaje.
¡Acaso, siete lunas tengo penando,
y a cuánta pena me traiga la luna,
a la noche espanto!
y si he de querer en esta vida,
que tanto quiero, los meses del año
en flor.
Que tanto querer, queriendo intento
Que labrador de caminos soy
fraterno, arcángel, paciente
ingenioso en amores, nada míos.
Yo contemplé
y te recorrí, mar adentro
Por que ahogados llevo los recuerdos
y convulsionadas tengo las posturas,
el conducto medular y la ciática.
Y nada más chocante
que seguir queriendo
y caminar sobre las sombras
de un omega, que golpea la mesa
de un beta, que ha perdido la cabeza
por un alfa.
¿Qué aconteció en marzo,
que abril quiere vengarse?
yo contemplé y te recorrí
aquella tarde que tanto mirar ansío,
que tanto querer perdido.
MBF@VICSOF 18214.22pm