Merly Balza

El miedo

El miedo habla y seduce,

Te hace creer que en él puedes confiar,

como un Casanova se engalana,

impostor en una caja de sorpresas, 

que se impone ante la abversidad.

Sin remordimiento te susurra y abraza,

sigiloso, abre su paragua 

antes de llegar la tempestad;

no para que te sientas listo,

si no, para poderte anestesiar.

Creemos que el crepusculo nos abraza,

pero el miedo, es un camaleon natural,

a veces no lo podemos tan siquiera notar,

y se aferra a nosotros, privandonos de libertar.

Si estamos, si nos vamos, si volvemos a empezar...

si saltamos, si no hablamos, si gritamos la verdad...

si salimos o nos quedamos, si llega la noche y solo tenemos soledad...

si estamos acompañados o vemos fantasmas en la oscuridad...

si arriezgamos, si enfrentamos, si buscamos para encontrar...

si aceptamos, si decidimos, si ayudamos a los demás;

el miedo... en todos lados está.

Es imperativo que nos cuidemos al andar,

Este mal consejero puede llevarnos por senderos,

Donde luego no podremos regresar.