emiliodom
Un día a la vez.
Hay dos días en cada semana, por los que no deberíamos preocuparnos, dos días que deberían estar libres de miedo y aprensión.
Uno de ellos es ayer, con sus errores y aciertos, con sus heridas y dolores.
¡El ayer ya ha pasado para siempre, y no hay nada que podamos hacer!!.
Todo el dinero del mundo, no puede deshacer ni uno solo de nuestros actos, no podemos borrar una sola palabra de las que hemos dicho. ¡El ayer ya se ha marchado!!.
El otro día por el que no debemos preocuparnos es mañana, con sus exigencias, promesas y problemas.
Tampoco el mañana está en nuestra mano. Eso nos deja solo un día: hoy. Cualquier persona puede batallar por un día.
Por lo tanto, ¡vivamos solo un día a la vez!