Mutilan las horas, asfixias de besos que no llegan,
una milesima de ganas para sentir más,
municiones de escusas no abrazan,
placeres que se guardan, no embriagan jamás;
suspiros gritan en silencio,
el ayer ya sembró sus miedos,
viviendo el presente ya no hay vacío,
el futuro… una canasta de pedos;
dueños de vidas prestadas,
el sueño del ser infinito,
la angustia de creer que algo acaba,
negando la entrada a paisajes bonitos;
no hay nubes que perduren en el mismo cielo,
ni lágrimas que no terminen con la risa,
el sol sin filtro provoca deshielo,
deseos sin limites, mas gracias que en misa;
apuñalan las horas, asfixias de besos que no llegan,
la palabra mágica es… “ganas”
no se atreve quienes en el mañana ahogan,
cuanto pecado hay en querer ser un banana…
estructuras que a fugitivo no aqueja,
presidiario escribiendo cartas en su desvelo,
corazón roto en su dolor envenena,
no interesa ver luz… solo naufragar en su pena.