CUENTAN LA HISTORIA DE UN POETA ENAMORADO
QUE SOÑABA A DIARIO CON UN DULCE DESPERTAR
DONDE LA LUZ DEL SOL ASOMABA A SU CUARTO ;
Y ENTRE SABANAS Y ALMOHADAS ANHELABA ENCONTRAR.
A UNA HERMOSA PRINCESA LLENA DE MELANCOLIAS
QUE POR PENAS Y ALEGRIAS NO SONREIA YA,
OLVIDANDO LAS VECES QUE MI ALMA PERDIDA;
AUNQUE FUERA A ESCONDIDAS LA SOLIA AMAR.
POR LAS NOCHES BUSCABA LA LUZ DE SUS OJOS
QUE ENTRE LLANTO Y SOLLOZOS
A GRITOS ME QUERIAN DECIR;
SOBRE UN SENTIMIENTO LLENO DE GOZOS
AL CUAL DESEARIA VOLVER A SENTIR.
Y MIENTRAS EL TIEMPO PASABA JUNTO A LOS RECUERDOS
UN INMENSO CARIÑO SE ASOMABA AL PORVENIR;
ANHELANDO CARICIAS RODEADAS DE BESOS;
QUE HICIERAN DESCUBRIR SU RAZON DE VIVIR.