Ese adiós se llevó los momentos más felices de mi vida, donde no solo se podía palpar el agua o saborear la felicidad, pensar como si estuviera siempre a ese olor a tierra mojada en días lluviosos con sol, te sigo pensando a cada minuto y segundo pero si digo adiós es para siempre aunque a cada rato te piense y sienta, porque ésta estrella fugaz que agarramos para construir una utopía de seguir luchando por esas vistas de vez en cuando se ha extinguido pero en ésta llama incesante de volver a encenderse aún cuando esté apagada, sin embargo aquí estoy y no sé cómo le haré para congelar, como un calor gélido?