Tanto temía que ese día llegara; que te fueras para siempre...
y te fuiste, un temor menos, pero un vacío que dejarás cada
minuto de lo que me quede.
Sin buscarte llegaste un día, te sentiste en casa y decidiste
quedarte en éste que fue tu hogar por tanto tiempo.
Solo me queda agradecer por enseñarnos que el amor viene
en distintas formas, por esas inocentes miradas de un amor
100% correspondido. Por todas las noches que buscaste calor
a mi lado, aunque en realidad era yo quien lo necesitaba.
Descansa pequeño. La vida es un rato, yo me quedo con la
fortuna de saber que en ti encontré un amor incondicional
y genuino, siempre serás mi más bello recuerdo; descansa tranquilo,
que si tu misión fue traer felicidad, fue más que cumplida
cada día que estuviste a mi lado