Fui un cobarde
de día y de noche.
De noche porque soñé
de día porque claudiqué
mis sueños atrás dejé
por la comodidad siempre opté.
Poco quise hacer
para mi futuro enriquecer
me quedé sentado
de día y de noche
me anclé en el ayer.
Ese ayer siempre lo justifiqué
nunca pensé,
lo mucho que habría de doler.