Tengo un cofre lleno de ilusiones
con el que algunas noches convivo
entre algún recuerdo fugitivo
que se ha escapado de mis balcones.
Memorias llenas de sensaciones
que acarician mi lado afectivo
regalando a mi mente el motivo
para pensar en nuestras pasiones.
Locuras atadas con listones
de un hermoso color expresivo,
llenándonos de amor positivo
y vistiéndonos de bendiciones.
Qué bello es evocar emociones
oculta en un momento furtivo,
junto a mi gran baúl emotivo
que me saca algunas confesiones.
Anna Gutiérrez