Que mañana te delaten tus sonrisas
cuando no quieras descubrirte
ante las cristalinas brisas
Que de la mañana emergen
que ante esta sensación de vida
sea feliz tu corazón
y se despierten tus ojos… querida,
¡no hay otra razón!
Sin el aliento de una chispa negativa
sea tu vida una lira de versos
que sonrían alejándose sin evasiva
de la amargura de sus besos
Que sigas recogiendo flores
las que se hayan al lado del camino
y no sufras por esos amores
que son consecuencia del destino
Que en tu ocaso seas feliz
y si me recuerdas algún día
cuéntale a esa luna gris
tu tristeza y también tu alegría...
(8, 13, 2015)