Tienen un gran corazón
las mujeres soñadoras
que son grandes formadoras
aplicando la razón.
Son dignas de admiración,
por vencer dificultades
con tenaces cualidades,
brindan siempre su ternura,
que provoca la ventura
por siempre: ¡Felicidades!
La mujer es portadora
de la fuerza espiritual
esto la hace excepcional,
de aplausos merecedora.
Con su actitud luchadora,
merece la pleitesía
por su perfecta empatía,
para enseñar a sus hijos
brindando cuidos prolijos,
con mucho amor cada día.
A la madre le dio el cielo
la gracia de procrear
y una aptitud para amar
a ese niño con desvelo.
La madre siempre es modelo,
por su actitud de templanza
que siempre lleva esperanza;
cuando llega la tormenta
se comporta siempre atenta.
merece nuestra alabanza.
La Mujer un ser divino
que se debe respetar
y con honradez amar
con ella empieza el camino.
Siempre con su excelso tino
se convierte en el regazo
que no tiene reemplazo,
hoy con toda mi pasión
le digo de corazón
¡Madre recibe mi abrazo!
Por la madre que ha partido
nuestro recuerdo amoroso
con un sentimiento hermoso
que el corazón ha bruñido.
Lágrimas nos han caído,
al pensar en su desvelo
por darnos siempre consuelo,
hoy convertida en estrella
sutil, refulgente y bella,
que nos cuida desde el cielo.