¡Ah! estas ganas de batir vuelo y escaparme lejos,
sumergirme en una esfera perfectamente abastecida,
o ser autopoiética y no necesitar de nadie ni de nada,
porque esperar decepciona y malbarata mis arrojos.
¡Es impotencia estar donde todo es molestia!
escuchar las voces que hablan de vanalidades
mientras yo solo quiero paz, saborear de la mies
y solo poder escuchar al silencio por compañía.
¡Hasta cuando podré dejar de sentir este enojo!
las buenas obras y las oraciones solo son rastrojo;
el amo de este mundo en su concupiscencia
se regocija al ver al justo anegado en la injusticia.
Ayudar aun sin esperar nada a cambio, trae zozobra;
porque la ingratitud se alía con la bajeza de la calumnia
para hacer escarnio del que obra con bien e inocencia
y solo recibe como pago maldiciones escabrosas.