Yo tengo un limonero que no quiere dar limones
Si acaso me regala algunos, como si fueran favores
Y lo riego cada día con tesón y con cariño
pero al muy desalmado no le gusta ningún mimo
Ya no sé qué hacer con este árbol tan tacaño
Cuando veo que los otros dan sus frutos todo el año
Preguntaré a un jardinero que me ilustre con su ciencia
Porque a mí !señor mío! Se me acaba la paciencia
Si tú arbolito mío me regalaras tu aroma
con tus frutas amarillas y con tus verdes hojas
me pondrías tan contenta que te daría un diploma
Andate con cuidado y no sigas dando guerra
Que si en ser travieso pones tanto empeño
Muy poquito me lo pienso y te arrancó de la tierra