Mirando mi vida
en medio de un bosque
frondoso, frescón,
frágil, primoroso,
me veo tan linda,
me veo más joven,
contenta en la vida,
de amor y de gozo,
de plantas con flores,
con frutos y ardillas,
con mucha alegría,
sin ningún rezongo,
en el caminito
verde y florecido
que pasa colinas,
con lomas, esquinas,
rodeando las casas
de mi pueblo amigo,
de calles con autos
besando el asfalto
y vías con trenes
de vagones altos.