Escribir un buen verso es muy sencillo
pues basta con juntar cuatro palabras
fingiendo o simulando que las labras
e intentas afinar con tu cepillo.
Un verso así escribir, es de aprendices,
tan simple como hacer un garabato,
tratando de rimar pasando un rato
y dar con la palabra de narices.
Escribir un poema es otra cosa,
no sirve que tú escribas a voleo
aquello que observaste en el paseo
acerca de una nube o de una rosa.
Que un poema no es bueno si en su entraña
no se halla de emoción su aditamento,
la brisa, la pasión o el sufrimiento,
que afecta al corazón al que le araña.
Veneno que se inyecta por la vena
y todo lo que toca contamina,
que en eso de gozar es una mina
y a aquel el que lo prueba le condena.
Bendita sensación la poesía,
supino ese alimento para el alma
con él llega el placer, llega la calma,
sin ella yo vivir no sé qué haría.
©donaciano bueno
http://www.donacianobueno.com/