Mi hija mayor
Hoy hago un alto en mi tristeza, hoy debo estar feliz,
hoy es un dia especial, hoy cumple años mi hija mayor.
Atravieso el peor momento en mi complicada vida,
se que difícilmente lograré recuperar algo de mi alegría,
el tiempo amainará mi pena y volverá mi tranquilidad,
la soledad de los afectos, sangra más mis heridas,
pero tambien sé que todo lo que consiga, tendrá nombre,
la dedicacion, el inmenso amor de mi hija mayor
Desde su residencia en la lejanísima Lisboa, Portugal,
de la mano de su incondicional compañero de batallas,
desde su arduo trabajo como médico en especialización,
con turnos agobiantes y largas jornadas de estudio,
preparándose para lograr los objetivos de su profesión,
ella, siempre dedicada, siempre atenta, asi es mi hija mayor.
A diario me llama, se preocupa, me anima, me formula,
sabe de mi resistencia a tomar medicamentos,
y me da soluciones efectivas que no vulneren mi “libertad”,
permite mezclar mis aguitas de hierbas, con una de sus pastillas,
a pesar de mi duda sobre la relacion: cefalea con anal-gésico,
ella siempre logra vencer mi resistencia, ella es mi hija mayor.
Para mi siempre será mi niña, inteligente, sensible, amorosa,
dedicada a su trabajo, a sus pacientes, cálida y cercana,
comprensiva con los adultos, dulce y tierna con los niños;
presentimos nuestros estados de ánimo, solo con saludarnos,
y desahogo de dolores y sinsabores mi alma, ella me escucha,
solo dice lo necesario, mi polo a tierra es ella, mi hija mayor.
Hoy, asombrándose con los históricos lugares de la legendaria Roma,
soportando los dias del verano Europeo, cada vez más ardientes,
tomándose un merecido descanso, de los alcoholes y algodones,
ve llegar su segunda veintena, en la ciudad santa, en la plaza vaticana
con la bendicion de Dios y la tranquilidad del deber cumplido,
le auguro felicidad eterna y mi promesa de amor perenne, a mi hija mayor
Ron Alphonso
23 de Agosto de 2021