Freddy Kalvo

Gazuza

A su merced, lo tiene la ingrata,

que lo inquieta, lo apoca y trastorna;

y, tres veces por día, retorna,

al pobre que su miseria, mata.

 

A su merced, lo tiene y maltrata;

de cuando en vez, su aliento soborna;

y otras veces, lo engaña con sorna,

cuando los sueños le desbarata.

 

Y sus dolores, son un enjambre,

de abejas que aguijonean duro…

porque, lo ponen en serio apuro,

 

cuando sintiendo va el cruel calambre

porque su ambiente es tan inseguro

y sin respeto, lo ataca el hambre.

 

Y antes que sea fiambre

que termine luego la injusticia

y aparezca pronto la justicia.