Eres libre,
tan libre como el viento,
puedes ir y venir cuando quieras,
o parar si así lo deseas,
sin importar a donde te dirijas,
tengo la certeza de que algún día
te volveré a sentir,
tal vez como una brisa suave de verano,
o tal vez, con algo de suerte,
un día pueda estar tan cerca de tí,
que pueda acompañarte
en el ojo de tu huracán
rodeado de tus tormentas.