Tu aura desprende una luz transparente,
Capaz de cegar al ojo más obtuso,
Quien no se fijaría en esa sonrisa radiante…
Y en esos ojos que eclipsan al mismo crepúsculo.
Debajo de esas prendas de ropa,
Escondes tantas virtudes…
Eres como el vino que llena mi copa…
Que tan solo en su aroma… se nota sus aptitudes.
El paso del tiempo se sonroja al contemplarte,
Te veneran las estrellas por tu belleza natural,
Como he de decirle a mi corazón que no ha de amarte…
Si antes de conocerte ya te empezó a amar.
De naturaleza emotiva vehemente…
Amas el color y proporción en la belleza.,
Te expresas con pensamiento independiente,
Te has metido de lleno en mi cabeza…
El origen griego de tu nombre,
Hace referencia al mismo Cristo…
Tu mirada dulce cautiva a cualquier hombre,
Porque jamás tanta belleza junta han visto.
Las odas que mi corazón te recita,
Las suspira cuando pasas…
Será porque te necesita…
Será… porque te ama.