Me pediste las manos
para sostenerte
Me dijiste que eran fuertes
Tú tan frágil
entre ellas te envolviste
Me pediste la mirada
para guardarte bajo mis párpados
Me dijiste que así reposarías de tus
insomnios conmigo
Me pediste mi boca
y así con mi voz te cantara nanas
Me dijiste que conmigo eras
una niña que el arrullo necesitabas
Me pediste los labios
para poder besarlos
Me dijiste que eran tan dulces
como duraznos maduros de tu huerto
Me pediste la lengua
cerraste los ojos y abriste el ánfora
Me dijiste es tan diestra que a ella
le entrego mis orgasmos encadenados
#PoetaUrbano