El corazón,
que es viejo y remendado,
está cansado.
Quiere dormir,
ajeno a tantos sueños,
y descansar.
Quiere parar
el tiempo y su reloj,
eternamente.
Mi corazón
precisa de latidos
y de trasplantes.
Se siente viejo
con sangre ya gastada
por mil batallas.
Pero no encuentra
la puerta y la fontana
que le renueve.
...De todas formas
preciso su coraza
para cubrirme,
Es por el viento,
los miedos a galernas
y temporales.
La vida pasa,
mi corazón se para.
¡Te necesito!
Rafael Sánchez Ortega ©
13/03/21