Tú eres el marinero
que toma el timón
navegas en aguas
saladas buscando
sirenas desdichadas.
Juegas de mil maneras
apostando en contra de todo,
desafiando a piratas
a cambio de tesoros.
Pero sólo encuentras
un frasco creyendo
que un piélago
te lo regresará.
Nada es así ni la seriedad
que abisma en ti;
porque hallas un paraíso
que ni siquiera alcanzarás.
Entonces será el amor a mitad
porque una marea te lo dará
mientras vas caminando
sobre el mar...