Buenos Aires tiene sus silencios
se envuelve en el fantasmal espectro de la nada
y a la vez lo todo
comienza a recorrer como un espejo
cara a cara
con lo sutil de la muerte.
Las calles pasadas las doce
desiertas conviven con sus penas
entre olores de mundos que se van
y otros que deciden despertarse
como si nada pasara
como si el curso de la historia
daría lo mismo su final.
Buenos Aires, tiene ese misterio
pantanosas historias que se cuentan
viviendo una y otra vez viejas fotos.