En la noche de ayer me pasó algo muy interesante en el barrio.
Vi patrulleros en la esquina de casa. Fue muy extraño, jamás los vecinos habían tenido problemas... pensaba yo, en ese preciso momento.
Me vi con la tentación de saber más, tratando de averiguar con Magela ; la vecina de al lado de casa y me comentó que Mariela los había denunciado. Lo que me pareció muy raro ya que eran muy buenos amigos.
Fui entonces hablar con ella y me comentó que los vio de noche descargando del auto una bolsa negra y que también andaban con una pistola en la mano,. me dijo que Daniel el vecino que vive al lado de su casa sabría más ya que se entera de todo...
Lastimosa mente golpe y golpe, pero no salió nadie. Juan que vive en frente de su casa me llamaba y cruce apresurada mente. Me dijo que no ve a Daniel desde ayer de noche, que Mario y Analia bajaron del auto muy de prisa con dos bolsas en la mano, una era negra y parecía tener algo... caía sangre de una de esas bolsas y tenía una pistola en la mano.
Mi vecino y yo nos enfocamos en el anciano que desapareció desde la noche de ayer... rara vez se lo había visto salir de su casa. Pero Juan está noche me dijo que los policías habían encontrado una pistola con sangre y un cuerpo torturado, ¡¡pobre anciano!! Nos comentamos... en fin Mario y Analia estaban en su casa muy tranquilos, ya la policía se había ido.
De pronto Mariela ; su mejor amiga me comentó que la pistola era de agua y la sangre era la salsa que se le había roto al caerse la bolsa que traía el maniquí y que Daniel estaba de vacaciones con sus hijos...
A causa del allanamiento , ellos se quedaron sin cocinar, el maniquí no se pudo reconstruir y su hijo no jugó con la pistola de agua.