Martina Iñiguez

Me gustás musarela - Parafraseando a Pablo Neruda en lunfardo.

Me gustás musarela...

 

Me gustás musarela porque estás como ida,

tu aluvión de parolas mis orejas no escracha

y si bien falta el vento y el laburo escasea,

una posta prudencia la trompa te remacha.

 

Como todos los días me llenás la busarda,

cocinás hasta un gato y diqueando osadía,

¡ranuna!, de la rama me bajaste otro sueño

y un gorrión con polenta me alivió la pazzía.

 

Me gustás musarela, yiranta de la luna.

Y estás como mufada, -ranuna de mi  nido-.

Y escuchás desde lejos y mi parla no llega

aunque diga pavadas a lastimar tu oído.

 

Dejame chamuyarte nomás con el aliento,

cálido como un faso, sencillo como un mate.

Sos como la catrera musarela y gomía

y tu aliento es el vino que encurdela a este vate.

 

Me gustás musarela porque estás como ida,

como si ya atorraras en la quinta del Ñato.

Una parola entonces y un embroque me alegran,

me alegran porque tengo percanta para rato.

 

Martina Iñiguez

 

Musarela: callada

Parolas: palabras

Escracha: destroza

Vento: dinero

Posta: buena, importante

Busarda: estómago, barriga

Diquear: ostentar

Ranuna: de rana, persona astuta, diestra

Pazzía: demencia, arrebato

Yiranta: callejera

Mufada: enojada

Parla: conversación

Chamuyar: conversar

Faso: cigarrillo

Catrera: cama

Encurdela: emborracha

Atorrar: dormir, haraganear

Embroque: mirada

Percanta: mujer