Tu y yo somos uno,
un universo; un todo
un par de versos;
unos flamantes enamorados
que se esconden para no ser
atrapados.
Se puede decir
que nos amamos
y a pesar de los años
nuestros corazones
permanecen intactos.
No somos presos de sí mismos
porque no renunciamos
a un te amo,
y desde nuestra prisión
nace el más inefable amor.
Tu y yo contemplamos el cielo
nuestro reflejo
yace en el mar y las gaviotas
cantarán sobre un inicio
y un final.
Tu y yo en contra de todo,
en la pobreza, riqueza,
en la más noble destreza,
en la poesía, en la vida
y aún más allá de lo que no será.
Tu y yo somos dos océanos
con diferente dirección
cada quien apuesta
según su convicción...