Mañana es tarde,
mejor vivir ahora,
intensamente.
Vivir el día
las horas y el minuto;
cada segundo.
Sentir la vida
llegar con sus regalos
y poesía.
Luego soñar,
en brazos del momento,
y sonreír.
Dejar la risa
que brote por los labios
y el corazón.
Y que contagie,
que busque en otros pliegues,
complicidad.
Por eso el hoy
es música y es verso
que está presente.
En cada instante
se escuchan las sirenas
y las mareas.
Sigue viviendo.
Que nadie te lo impida.
¡Siente el presente!
Rafael Sánchez Ortega ©
23/03/21