Nunca dejes que absurdo paradigma
con sus reglas antiguas que aprisionan;
te convierta en la esclava que respira
con tabúes que impulsan viejos dogmas.
No te importe jamás lo que te digan
los beatos con caras santurronas;
que existencia tu debes de vivirla
sin cadenas hipócritas que atontan.
Deben ser tus instantes en la vida
una fiesta de amor esplendorosa;
sin pensar que tus ansias son proscritas
y podrías perder la \"Santa Gloria\";
esa gloria mentida que predican
negociantes de fe, que vuelven droga.
Autor: Aníbal Rodríguez.