Antonela Chiussi

Surrealismo

Respiré hasta la última gota de aire disponible en este universo y salté.

Me encontré sumergida en nubes tornasoladas que danzaban inquietas pero alegres.

Levitaba estilo mariposa, mientras un pez negro de ojos saltones me hacía cosquillas en el dedo meñique del pie izquierdo.

A lo lejos estalló un chillido tan agudo que resonó en mis escamas, dejando mis orejas temblando.

La luna en ebullición, evaporaba el cielo.

Vomité miel y salí a flote.

Una vez en la orilla, pude exhalar, devolviendo el resto de aire, que ya no me pertenecía.