No sé qué me tratas de decir !
aunque me lo digas a diario
y veo tu mirada cómplice de mis ilusiones
Aunque estoy fuera de tu abecedario,
Veo tu mirada fija, sobre el sol naciente,
en los horizontes que cruzas a diario...
con tus febriles azules,
que cuando sonríen,
dibujan un día más en mi calendario.
Veo tu mirada fija hacia el sol ardiente
y mi corazón deja de ser amargo,
se hace dulce como el café de la mañana
Esa mañana en la que te cruces por mis labios.