Me gusta lo nuestro, porque va más allá de forjar una casa y jugar a ser felices.
Me gusta lo nuestro, a secas y sin complementos, porque mientras yo escribo vos pintas y los dos nos unimos en un universo fuera de lo normal, y vos tenes que entender que a mi me gusta eso, por muy fugaz que eso pueda ser, porque me conozco y estoy loca, y de la nada a veces me alejo. Pero vos también tendes a tener esa parte que es lo que más me gusta de vos. Me gustas porque nos veo en unos meses escuchando a chopin con una tasa de vino en la Antigua. Me gustas porque haces unas cosas bárbaras con esas manos tuyas, hablo de tacto y arte... Porque yo antes lloraba por un ser tan común cuando no sabía que afuera había alguien con quien podía tocar el alba con una sonrisa. Porque no sos como los otros, no pensás igual, me escuchas tan delicadamente que espero con ansias volver a verte otra mañana después de haberte visto en la madrugada hablando del mundo y su viento...
Me gustas porque a pesar de que siempre me pierdo, hablando con vos como si el mañana fuese eterno, puede que me encuentre un poco y sencillamente eso me gusta.