Francisco 1987

Algo que perdí hace 300 noches

Entre los zarzales de la indeferencia

nunca culminaba este poema

se repetía hacia el infinito

testículos temblorosos

vulvas histéricas...

la masonería omnipresente de las bibliotecas

y esa flagrancia de los ríos

de las ramas, de la embelesa amistad...

Un grito entre los pasadizos

de los fríos y oscuros condominios

Zlatan se está masturbando viendo penes de africanos,

Lío está pensando comprarse un vibrador

Cristiano se está afeitando las nalgas...

las lesbianas desean tener pene

los gays añoran tener una vagina bien peluda... 

y yo, y yo que duermo cinco horas al día

camino por las calles frías con música en los auriculares

y busco algo que perdí hace 300 noches