Lucy Quaglia

Se va

Se va, se va la barca, 

no se sabe para dónde

ni para qué si se va, 

porque las barcas viajaban

recorriendo por demás

kilómetros de distancias

en el tiempo del querer

que nadie quiere borrar.

Se va, se va para siempre,

nadie la puede frenar,

me gustaría ser barca

cuando se trata de amar,

pero no sé si el destino

me dejaría viajar

mientras prefiero quedarme

muy cerca tuyo, a tu lado

en un hogar a gozar.