POESÍA
¡Oh! poesía; estrella divina que guardas en tus lineas
el alma enamorada y doliente del ser.
Hombre o mujer, recibes los besos que salen del pecho
en forma de versos de nuestro querer.
Eres la miel, pura y sin cera
Y también sin abeja; pero sí con el néctar de amor y placer.
Las noches en velas de brumas y nieblas, de cama sin hembra, un vaso de ginebra y la estrella de letras se empieza a tejer.
Dolor y amor se unen a un canto que va disolviendo las letras también.
Reprimes las penas las angustias menguan, cual manos que fueras
frágiles tiernas de la amada mujer.