El teclado, es un puente
como la mirada lejana
comprendiendo la distancia
el teclado es Dios
escuchando tus palabras...
descifrando pensamientos
creando universos.
Como Él
en el vano intento
de hacernos
tal como quiso ser
y no pudo.
El teclado en su infinita posibilidad
es ese puente
que nos lleva a ser
ese Dios
de alboradas y fracasos
en letras que viven
entre unos y otros
algorítmicas
y fugaces.