A veces es difícil amarte,
a veces se pierde el sentido,
pero el amor es una fe sin fin,
y corre como agua del rio.
A veces te amo y es un delirio,
bebo de ti con sed savia y espíritu,
la lluvia cae y moja el camino
y en ti ya tengo mi destino.
A veces vuelvo atrás y desconfío,
me digo encúentrate a ti mismo,
y sigo los ecos de mi silencio vacío
hasta perder las huellas del olvido.
A veces te busco para dar conmigo
y eres puente sobre mi abismo,
porque se que sin ti estoy perdido
y que en ti terminan mis caminos.
A veces todos los días se repiten,
se repite la historia y el sentido
y vuelvo a ti a construir mi nido
un domingo de otoño arrepentido.